Editorial
Nuestras Noticias
La Secretaría de Comunicaciones y Transportes, como muchas de las dependencias del gobierno federal, tienden a ocultar la información que por ley están obligadas a mostrar a cualquier ciudadano que la solicite, sin más trámite que los que fija la ley de transparencia respectiva.
El asunto se complica si usted quiere saber, por ejemplo, cuáles empresas participaron en una licitación determinada y de cuánto fueron las ofertas que presentaron, porque la información se reduce a señalar el tipo de obra que se licita, las empresas participantes y la empresa que resultó, en apariencia, ganadora de la licitación.
Tampoco se informa cuáles fueron los montos que cada una de las empresas propuso, lo que deja en estado de indefensión no sólo al resto de las empresas participantes, sino a los ciudadanos que quieren ejercer su derecho de enterarse de los detalles finos de una licitación determinada.
Tal es el caso de la obra de ampliación, remozamiento y construcción de puentes y diferentes obras en la carretera Manzanillo-Cihuatlán, que según una de las empresas inconformes con el resultado, la asignación se hizo a una empresa que quedó en los últimos lugares y que el presupuesto presentado fue casi el doble de las que quedaron en primer lugar.
La empresa señalada como la que habría sido beneficiada por tal situación fue Ardica Construcciones.
Sin embargo, estos datos no pudieron ser verificados, porque la dependencia sólo tiene, en su página web, información relativa al 2008, así que si usted desea enterarse de primera mano de los resultados de las licitaciones, además de la falta de datos de verdadero interés como los del monto de los presupuestos presentados por cada empresa, tampoco puede saber qué asignaciones de obra se hicieron en 2009 y menos puede conocer nada acerca de las hechas en este año que transcurre.
La opacidad, el ocultamiento de datos, se presta para la especulación y para darle aliento a ese clima de corrupción que campea en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, particularmente en la delegación Colima de esta dependencia federal.
En estos tiempos, cuando la sociedad exige transparencia, la SCT parece caminar en sentido opuesto, al ocultar la información que demandan los ciudadanos. ¿Qué esconden?
No lo sabemos, pero ojalá alguien esté dispuesto a esclarecer estos temas.
Y usted, amable radioescucha, ¿qué opinión tiene al respecto?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario