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viernes, octubre 30, 2009

Silverio, Como Fox

El seis de marzo de 2001, escribí la siguiente colaboración en un diario local. Considero que hoy, precisamente hoy, su vigencia y pertinencia son aún mayores.

“Estoy total y absolutamente de acuerdo con usted, señor Presidente Vicente Fox Quezada. Lo estoy, vale aclararlo, con lo que dijo durante la reunión sostenida con sectores productivos oaxaqueños y el gobernador de aquella entidad. Lo estoy, simple y llanamente, porque tiene usted, señor Presidente, total y absoluta razón. Por primera vez fue Usted, desde que empecé a leer acerca de sus andanzas e intenciones, un hombre honesto, diciendo verdades, hablando con el corazón en la mano, sin pensar en el efecto que sus palabras, sus estúpidos chistes o sus vanos intentos de alburear –lo que francamente lo hace ver ridículo, Señor Presidente– puedan tener en la opinión popular devenida encuesta.

Ahora, espero que sea Usted, también por primera vez, congruente con sus dichos, Señor Presidente. Espero que sea capaz de evitar hacer todo lo que usted critica con tanto afán. Pero, ¿por qué estoy de acuerdo con Usted, Señor Presidente Vicente Fox Quezada? Por, reitero, algo de lo afirmado por Usted en la reunión llevada a cabo en Oaxaca: “...Tenemos que poner los pies en la tierra, el gobierno Federal no tiene los recursos que todo mundo piensa que tiene; se cometieron muchos errores en el pasado y la mitad del presupuesto disponible es para pagar deuda y los errores del pasado: rescates carreteros, rescates bancarios, rescates de los sistemas de seguridad social...”. Fin de la cita.

¿Ve Usted, Señor Presidente Vicente Fox Quezada por qué estoy de acuerdo con Usted? Porque una y otra vez hemos insistido millones de mexicanos que esas acciones llevadas a cabo por presidentes priístas. Esos tan criticados por Usted, Señor Presidente Vicente Fox Quezada. Ahora deseo, como millones de mexicanos, que me expliqué con palabras sencillas, objetivas, claras, sin adjetivos, de ser posible, por qué Usted, Señor Presidente Vicente Fox Quezada, es exactamente igual de farsante, demagogo y ahora hasta payaso, como los presidentes priístas, sus antecesores, a los que Usted tanto critica.

¿Puede usted explicarme, Señor Presidente Vicente Fox Quezada, por qué comete tantos actos al margen de la ley y la Constitución? ¿ Por qué metió a sus amigotes al Consejo de Administración de PEMEX, a pesar de que algunos de ellos tienen conflictos de intereses al tener a la paraestatal como uno de sus principales clientes?

¿Le puedo decir algo en confianza, Señor Presidente Vicente Fox Quezada? Usted jamás me ha decepcionado y jamás lo hará. ¿Quiere saber por qué? Por una razón sencilla y elemental: Usted, Señor Presidente Vicente Fox Quezada, jamás me ilusionó, jamás me hizo pensar que es honesto, sincero y cabal. Por el contrario, Señor Presidente Vicente Fox Quezada, dije antes, y lo reitero ahora, que Usted es igual que un producto cualquiera de la publicidad, sus dichos, sus palabras, sus actitudes, son desechables y olvidables a la primera.

En este sentido, Señor Presidente Vicente Fox Quezada, deseo hacer una aclaración, si bien una doble negación nos da una verdad, eso no significa que Usted no sea tan deshonesto como todos los demás presidentes que hemos padecido.

Fíjese bien, Señor Presidente Vicente Fox Quezada, desde el día que tomó posesión de la presidencia ha convertido a al poder ejecutivo federal en un verdadero desgarriate. Su promesa de reducir la burocracia se fue por la borda desde el momento mismo de rediseñar su gabinete. Mejor dicho, desde antes, cuando designó al gabinete de transición, aquellos que tenían mucho amor a México, sabían inglés, computación y que, maravilla de maravillas, no iban a cobrar ni siquiera un peso por su trabajo. Bull shit, diría nuestro canciller. Mentira, demagogia, farsa, llámele como quiera, Señor Presidente Vicente Fox Quezada, pero nada bueno ha ocurrido para los mexicanos desde que tomó Usted posesión de la presidencia de la república. Así, con minúsculas ambas, como el águila foxisahagunista.

¿Sabe cuál es el verdadero problema, Señor Presidente Vicente Fox Quezada? Con los priístas ya sabíamos a qué le podíamos tirar, sabíamos que los últimos fueron tecnócratas que buscaron, y lo consiguieron, terminar con la clase política que construyó este país. Entonces, primero tuvieron el poder los políticos, luego los economistas devenidos en viles tecnócratas, pero ahora llegamos a la etapa de la degradación de la política: los bufones arribaron al poder.

Esto es lo terrible, Señor Presidente Vicente Fox Quezada. La mayoría de los mexicanos que emitieron su voto el dos de julio le depositaron su confianza. Querían un cambio en su beneficio. Querían a una persona que trabajara para ellos, que los ayudara a salir de las condiciones en que viven. Esa fue la ilusión. Ese fue el sueño. Pero al despertar –con el debido respeto a Tito Monterroso– el subcomediante Fox estaba ahí.”.

Tal vez usted, amable lector, coincida conmigo en la pertinencia de retraer este comentario publicado hace más de ocho años y medio.

TRES COMENTARIOS AL MARGEN

1. Mañana concluye el periodo para el que fue electo Silverio Cavazos. Sus hechos serán juzgados por sus conciudadanos y, como suele ocurrir, recibirá más puyas y golpes por parte de quienes más ayudó e impulsó. Los más acérrimos silveristas de hoy, hoy, hoy, serán los primeros en arrojar piedras mañana. Así ha ocurrido antes y no hay razones para pensar que podría ocurrir, precisamente, lo contrario. Ya lo constataremos y daremos cuenta de ello.

2. Sergio Bravo Sandoval cometió una grave falta ética en el ejercicio de su cargo: empleó a su padre para dar fe de un acto comercial entre particulares y el gobierno que él representaba. Tal vez no fue al margen de la ley, pero sí de la ética. Ello mancha su actuación como secretario de Turismo del gobierno estatal.

3. Hay personas que toda su vida guardan rencor a un mendigo por no haberle dado nada. Karl Kraus.

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viernes, octubre 23, 2009

Impuestos, Labor Ingrata Pero Necesaria

Cobrar impuestos ha sido siempre una labor ingrata. Saulo, según se cuenta, era un recolector, cobrador o como usted quiera llamarlo, de impuestos del imperio romano. Era un hombre odiado, como lo son ahora quienes representan en todos los países a la dependencia encargada de esa ingrata pero vital tarea para cualquier gobierno.

Por eso entiendo los gritos y los sombrerazos que han acompañado al proceso de la discusión, análisis y aprobación de la ley de ingresos del gobierno federal para el próximo año. Es cierto, las leyes fiscales mexicanas tienen grandes boquetes por donde se van, de manera descarada pero legal, cientos de miles de millones de pesos anualmente.

Es tristísimo ver como los grandes consorcios, las grades empresas instaladas en este país, son quienes menos contribuyen al gasto público porque son quienes menos impuestos pagan y no digo esto en términos relativos, sino en número absolutos.

Ha sido la propia Secretaría de Hacienda la que ha puesto en la mesa de discusión a las empresas y los montos que pagan anualmente de impuesto sobre la renta o por el Impuesto al Valor Agregado, el famosísimo IVA. Se va usted e espaldas cuando se da cuenta que Televisa, por citar un caso, paga menos impuesto sobre la renta, el ISR, que un director de secundaria con plaza en nivel D de carrera magisterial y con el 100 por ciento de sobresueldo, cuyo sueldo mensual no pasa de ser cercano a los cincuenta y cinco mil pesos mensuales brutos, es decir, antes de que le sea descontado el ocho por ciento de aportaciones al ISSSTE, el uno por ciento por cuotas sindicales y lo relativo al ISR.

Usted puede pensar que exagero al señalar lo anterior, pero puede consultar y comparar las páginas electrónicas de Hacienda y la SEP para ver que mi dicho es cierto a cabalidad.

Me gustaría que usted hiciera un alto en el camino y me acompañara en las siguientes consideraciones y reflexiones: la inmensa mayoría de los ayuntamientos del país están en la ruina económica; la misma situación acontece a los gobierno de los estados; la situación económica actual es crítica y las perspectivas de que se componga son lejanas y, por lo menos, será hasta el 2011 tendremos un ligero repunte, según los expertos en el tema económico.

En este sentido, no hay dinero para nada. Literalmente para nada. Esto produjo una paradoja: necesitamos dinero para seguir funcionando como país, pero nadie quiere poner nada. Todos quieren dinero, pero nadie quiere aportar un céntimo.

Es evidente que estamos ante la paradoja planteada por Unamuno, cuando decía que los países más ricos lo eran porque invertían más recursos en la educación de sus poblaciones, pero la paradoja estaba en el hecho probado de que los países más educados eran aquellos cuyos gobiernos tenían los recursos suficientes para destinarlos a la educación en todos sus niveles.

Ahora bien: los impuestos aprobados son necesarios. Debemos reconocerlo, aunque nos disguste hacerlo. Pero también es cierto que el gobierno debe hacer un esfuerzo real. Mire usted: lastima saber que el alcalde Coquimatlán destine una cierta cantidad de dinero, poco más de 25 mil pesos mensuales, para gasolina de su vehículo oficial, cuando ese municipio tiene graves problemas económicos y no tiene, siquiera, para cubrir las deudas que tiene el sistema de agua potable con la CFE por la energía eléctrica utilizada para extraer y movilizar el agua potable.

Los ciudadanos debemos exigirles a los gobiernos -federal estatal y municipales-, que hagan un uso eficiente de nuestros recursos, que no haya dispendios.

El gobierno federal podría disminuir su gasto en materia de comunicación social, eso es una lanototota. Esos recursos podrían tener un mejor destino. Podrían, también, desparecer tantas delegaciones que no tiene función real: la de la SEP, por citar una de ellas, porque no tiene funciones operativas y es “sólo” una representación de la dependencia. Así mismo, podría desaparecer Sedesol y sus funciones podrían ser absorbidas por la dependencia estatal del mismo nombre, lo mismo pasaría con la Sagarpa, que sería federalizada y el gobierno estatal, a través de la Secretaría de Desarrollo Rural, podría manejar los programas y recursos sin ningún problema.

El esquema podría ser similar al usado con la federalización de la educación básica y normal.

Pero volvamos al principio: a nadie nos gusta pagar impuestos, aunque sepamos que ahora, los estados y municipios tendrán más dinero con ese uno por ciento adicional al IVA y ello vendrá a remediar, aunque sólo sea en parte, la gran crisis por la que atraviesan y cuyo final no se avizora en el corto plazo.

Una reflexión final: el incremento del dos por ciento al índice superior del ISR, que pasará del 28 al 30 por ciento, afectará a muy pocos mexicanos, porque debemos recordar que el pago de este impuesto es proporcional a los ingresos que se tienen y que quienes ganan hasta cuatro, o cinco, salarios mínimos están exentos de hacer dicha contribución.

Los otros impuestos, los relativos a la cerveza y el alcohol, son necesarios y los consumidores pueden pagarlos sin ningún problema. El asunto de las telecomunicaciones se cuece aparte y merece un comentario especial

TRES COMENTARIOS AL MARGEN

1. Fui invitado por Jesús Llanos a integrarme a Grupo Radiorama en Colima, a través de la W, en el 1020 de amplitud modulada. Es una nueva y grata experiencia, sobre todo por el hecho de levantarme a las cinco de la mañana para iniciar el programa a las seis en punto. En Lo Que Se dice, que tal es el nombre del programa, hay un ejercicio pleno de la libertad expresión, tal como ocurre aquí en Milenio Colima.

Es gratificante trabajar con tanta libertad de acción y expresión. Si usted suele levantarse temprano, lo invito a sintonizar la 1020 de amplitud modulada y escucharnos, tal vez hasta se divierta un poco

2. Para ti soy un ateo, pero para Dios soy un miembro de la oposición. Woody Allen

3. Soy un prófugo de la injusticia. Felipe Aguirre

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viernes, octubre 16, 2009

Falsedades o Mentiras

Los políticos suelen tener una credibilidad muy baja. Usted puede constatarlo si consulta cualquiera de las muchas encuestas realizadas con ese propósito. La credibilidad de los políticas es aún menor a la de los policías.

Empresas encuestadoras locales, como Proyecta, y nacionales, como Mitofsky, suelen realiza regularmente estudios cuyos resultados confirman mi aserto. ¿Por qué la sociedad confía tan poco en los políticos? ¿Por qué “político” es un término cuya equivalencia es la de mentiroso o falsario?

Debemos reconocer un hecho probado y comprobado: los políticos son quienes más contribuyen a darle certidumbre a este concepto. Sin haber necesidad, suelen soltar falsedades o, de plano, mentiras. Insisto, sin ninguna necesidad. Los ejemplos sobran y para muestra basta un botón muy colimense, porteño, para ser preciso.

Hace pocos días, hubo una reunión entre una de tantas asociaciones de jubilados y pensionados, federales y federalizados, y legisladores federales. La nota publicada da cuenta de los pormenores de la reunión y de las respuestas de los legisladores a sus peticiones, fundamentalmente relacionadas con el asunto de la homologación de pensiones y jubilaciones, en especial algunas prestaciones de los trabajadores de la educación pensionados y jubilados por el gobierno del estado.

La nota publicada da cuenta de cómo la senadora panista Martha Sosa de Rodríguez García, nacida en la primera mitad del siglo pasado, se comprometió a llevar el asunto al senado -así, con minúsculas- para allí, mediante la aprobación de un punto de acuerdo, promovido por la propia senadora porteña, atender las peticiones de los jubilados y pensionados e incluirlas en el próximo presupuesto de egresos de la federación.

Cuando leí esto, no supe si reírme o llorar. Debo reconocerlo: la acción de la senadora panista no me sorprendió, porque así actúa regularmente la señora Sosa de Rodríguez García. Mire usted, amable lector: desconozco si la señora Sosa dijo falsedades o mentiras y digo esto porque el asunto del punto de acuerdo en el senado es una vacilada, una verdadera broma. No tiene ningún valor, no sirve para nada.

Me explico: el Senado no tiene vela en el entierro en cuanto se refiere a la aprobación del presupuesto de egresos. No tiene absolutamente nada qué ver, porque es una facultad exclusiva de la Cámara de diputados. Punto. Es en el presupuesto de egresos, precisamente, donde se podría incluir a los jubilados y pensionados y así, pudieren ser beneficiados con algunas partidas cuyo prepósito sería satisfacer sus demandas.

En el Senado se discute, como Cámara revisora, el asunto de la Ley de Ingresos. Así, la Senadora Sosa podría comprometerse con los colimenses a no votar a favor de incrementar impuestos, particularmente el dos por ciento a alimentos y medicinas y el cuatro por ciento a telecomunicaciones. Eso podría tener valor y no lo del citado punto de acuerdo, cuyo destino sería, precisamente, la Cámara de diputados, a donde se turnaría el multicitado punto de acuerdo.

Ahora mal: no sé si la senadora Sosa dijo falsedades o mentiras. Me explico: si ella dijo falsedades, es decir, cosas que no son ciertas, implica que desconoce qué puede y qué no puede hacerse en el Senado. No sabe, pues, cuáles son los asuntos que pueden, mediante un punto de acuerdo en esa Cámara, convertirse en realidad. Recuerde usted: las falsedades pueden decirse de buena fe, porque se piensa, se cree y se toma lo afirmado como cierto, aunque en realidad no lo sea.

Por otra parte, si la senadora Sosa sabe qué se puede y qué no se puede hacer en el Senado, entonces debemos reconocer que la porteña mintió linda y orondamente a los jubilados y mencionados, es decir, les dijo falsedades a sabiendas de que lo eran. La señora sabe que el punto de acuerdo tiene tanto valor como el papel en que quedará escrito y quizá hasta menos. Y lo digo porque la señora senadora Sosa también sabe que ella no tiene peso específico en el Senado, no significa nada más que un número, que una curul, no tiene su voz un peso propio. Eso es un hecho, simple y llanamente un hecho, y el asunto es porque ella no es la coordinadora de su fracción, ni preside ninguna comisión y en la que debería estar, en la de límites, no está. Tampoco es líder de un grupo político con importancia nacional, regional o estatal al interior de su partido. ¿Entonces?

De esta manera, mentir tiene una intención: engañar al interlocutor, hacerle pensar que algo va a ocurrir cuando la parte emisora sabe de antemano que no será así. Es decir, mentir implica mala fe, engaño, deslealtad, trampa, astucia, ardid, sosería, hipocresía, artimaña, añagaza y cuantos sinónimos pueda usted añadir.

Por acciones como ésta, la gente pierde la fe y disminuye la credibilidad en los políticos. En el caso particular de la senadora Sosa de Rodríguez García, me parece lamentable su actuar, sobre todo porque no había ninguna necesidad de hacerlo de esa manera. No había necesidad de mentir a quienes, esperanzados, aplaudieron su intervención en el acto ya referido.

Por eso pregunto y me pregunto: ¿hay necesidad de que los políticos nos mientan? ¿Mienten por gusto, por sistema?

No lo sé, pero ojalá usted pueda ayudarme a encontrar respuestas.

TRES COMENTARIOS AL MARGEN

1. Ayer tomaron posesión los 10 alcaldes de la entidad. Manzanillo y Colima, nuevamente tienen las mayores expectativas. En una colaboración posterior habremos de comentar los nombramientos hechos por ambos alcaldes. En el resto de los municipios, la pobreza y miseria los hacen ver, más que como alcaldes, apenas como meros paga-nóminas.

2. Al parecer, la posposición de la toma de protesta a los munícipes entrantes de Tecomán se debió a la falta de quórum del cabildo saliente. El hecho niega aquello de “dinero maldito que nada vale”, ¿no?

3. Cualquiera que tenga forma puede ser definido, y cualquiera que pueda ser definido puede ser vencido. Sun Bin

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viernes, octubre 09, 2009

Ayuntamientos, Estas Ruinas Que Ves

El próximo jueves rendirán la protesta de ley los 10 alcaldes de la entidad. Será un día de fiesta para ellos, sus familias, sus amigos, sus simpatizantes y más para quienes serán sus colaboradores , sobre todo quienes accederán a un cargo en la administración pública por primera ocasión.

El asunto es que la realidad los alcanzará en cuanto se enteren a detalle de lo que ocurre en la dependencia de la que a partir de ese día y hasta el momento en que sean separados, tendrán la responsabilidad de cuanto ocurra en ella.

Ya es sabido que los nuevos funcionarios suelen tener más disposición y ánimo para hacer las cosas que conocimiento específico de lo que deben hacer y sobre todo, de cómo deben hacer su trabajo para resulte en beneficio del ayuntamiento, de la sociedad y de ellos mismos.

Los nuevos presidentes municipales recibirán, casi sin excepción, unas finanzas depauperadas o, de plano, en un crítico estado, tal como ocurre en Tecomán, Coquimatlán y otros municipios más, donde hay problemas serios para la prestación de los servicios básicos a la población.

Es cierto, puede decirse, sin temor a equivocaciones, que la crisis económica de los ayuntamientos de Coquimatlán y Tecomán tiene orígenes y razones diferentes, pero el caso es lo mismo: la incapacidad institucional para cumplir con sus obligaciones y responsabilidades.

A más de la pobreza en Coquimatlán, debemos considerar el hecho de que los usuarios no pagan el servicio de agua potable. Así de simple: las cuentas no salen. Lo recaudado no ajusta ni para cubrir los gastos de operación del sistema de agua potable, drenaje y alcantarillado del municipio.

Tenemos un caso patético: las sufridas finanzas del municipio se ven aún más menguadas debido a que deben financiar al sistema operador de agua, porque muchos de los usuarios simple y sencillamente no pagan lo que consumen. Y no lo han hecho por años.

Este asunto se ha vuelto un grave problema para los alcaldes, aunque ejemplifiquemos con el de Coquimatlán, porque han preferido financiar el servicio que cobrarlo de manera eficiente. No han cumplido su responsabilidad a cabalidad, y no lo han hecho porque se ha confundido en el ejercicio político la prestación de los servicios con el de los derechos.

No le demos vuelta: los alcaldes, en su inmensa mayoría, prefieren endeudar al ayuntamiento para subsidiar al organismo operador de agua potable en su municipio, que obligar a los usuarios a pagar lo que les corresponde. Y no lo han hecho porque no desean confrontarse con sus conciudadanos y no lo hacen porque quieren ir en busca de otro cargo de elección popular y temen recibir el castigo por una acción de esta naturaleza.

Los actuales directivos de CAPDAM, el organismo operador en Manzanillo, llevaron a cabo un programa y parece que obtuvieron buenos resultados y funcionó así: fueron directamente a las colonias y barrios del puerto, principalmente, y buscaron a los deudores en sus viviendas. En la mayoría de los casos, lograron llegar a acuerdos con los morosos y convinieron formas de pago acordes a su situación económica personal. Fueron acuerdos diferenciados, porque eran condiciones distintas, pero la gente terminó por pagar sus adeudos, o está por hacerlo.

Pero este caso fue la excepción y no la regla, por desgracia.

Ahora bien, Manzanillo tiene los más altos costos de operación del sistema. El acarreo del agua desde Armería por más de 45 kilómetros, los cientos de válvulas de frenado que deben usarse, la orografía del puerto que vuelve indispensable el rebombeo hasta los tanques de almacenamiento y luego la conducción hasta cotas impensadas en otros municipios.

Un problema similar es el manejo de las aguas residuales, negras y grises.

Sin embargo, a pesar de todo ello, Manzanillo es el organismo que puede llegar a tener finanzas sanas en un tiempo prudente. Tiene dos oportunidades que, hasta hoy, no ha sido posible aprovechar: una se refiere a que la Comisión Federal de Electricidad, CFE, adquiera el agua directamente a la CAPDAM y no con la Conagua, como ocurre en la actualidad. Este cambio beneficiaría tanto a la CFE como a la CAPDAM, a la primera porque pagaría menos por los mismos volúmenes de agua consumidos y a la segunda porque el pago anual recibido podría significar poco más de un 60 por ciento del pago que, a su vez, hace a la CFE por la electricidad consumida en un año.

El otro punto de oportunidad sería que la API aceptara que el surtimiento del agua potable a los barcos fuera hecho directamente por la CAPDAM, lo que vendría a mejorar de manera muy significativa sus finanzas, porque en la actualidad, la API es el organismo intermediario y, como todos los de su tipo, se queda con enormes ganancias por la venta del agua a los buques.

Esta sería una manera concreta de regresarle a Manzanillo una parte pequeña de lo mucho que el municipio y el estado invierten para que la API funcione mejor. Lo demás es mera demagogia.

Pero lo interesante es que todos los municipios serán entregados con una deuda creciente y en algunos casos, los alcaldes salientes dirán: te entrego “estas ruinas que ves”, con perdón de la película del mismo nombre.

TRES COMENTARIOS AL MARGEN

1. En Manzanillo, Nabor Ochoa López rendirá la protesta de ley en ceremonia que iniciará a las 10 de la mañana del 15 de octubre. Los manzanillenses saben que contarán con un alcalde que sabe lo que tiene que hacer y que no necesitará un periodo de tiempo para aprender los vericuetos de la administración. La relación de sus colaboradores será una de las medidas que se tengan para saber hasta dónde desea llegar el porteño. Veremos y opinaremos.

2. El panista Armando Reinoso Femat, gobernador de Aguascalientes pidió a la PGR que retire los 20 elementos que envió a aquella entidad porque “más bien han venido a delinquir”, dijo. Más directo y claro, imposible. ¿Lo atenderá Calderón?

3. El que quiere interesar a los demás tiene que provocarlos. Salvador Dalí

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viernes, octubre 02, 2009

LVI Legislatura, La Ruta Fácil

Como le informé en este mismo espacio el jueves 9 de julio, la LVI legislatura local se integra con 14 diputados del PRI, siete diputados del PAN, tres diputados del PNA (Partido Nueva Alianza), y un diputado del PT.

La decisión de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación fue en el sentido de ratificar la sentencia de la Sala regional Toluca del mismo tribunal que, a la vez, ratificaba la determinación tomada por el Consejo General del Instituto Electoral del Estado de Colima.

Cabe señalar que dicha determinación, aseveraron los magistrados de la Sala Superior del TEPJF, está apegada a Derecho y no más que discutir. Los alegatos de panistas, perredistas y verdes fueron insustanciales y fueron desechados de plano. Los gritos y las fanfarrias de nada sirvieron, como de nada habían servido los escándalos, la propaganda negra y la demagogia durante la campaña.

Los panistas pueden decir que ahora gobiernan tres municipios y antes gobernaban sólo dos, pero cabe señalar que, sumada la población y recursos de los tres de ahora, Tecomán, Armería y Coquimatlán, podremos ver que ahora los panistas gobernarán a menos población y tendrán, obviamente, menos recursos.

En el congreso local, los panistas tendrán no sólo menos diputados, sino que tendrán una bancada sin experiencia parlamentaria, sin capacidad para la tribuna, aunque con un coordinador más dado a arreglar las diferencias por la vía de los golpes, los gritos, los insultos y los sombrerazos, que por la construcción de acuerdos mediante el análisis comparativo de las propuestas de las partes integrantes de la mesa.

Ahora bien, el órgano de gobierno del congreso local es la Comisión de Gobierno Interno y Acuerdos Parlamentarios y esa la presidirá la coordinadora de la fracción parlamentaria del PRI, Itzel Ríos de la Mora. En pocas palabras, el PRI tendrá el control, el mando indiscutible de dicha comisión, porque los acuerdos se toman de acuerdo con el peso específico del coordinador de cada grupo parlamentario y si el PRI tiene 14 diputados, el voto de Itzel es y será suficiente para aprobar cualquier punto, les guste o no a los demás coordinadores.

Por supuesto, en el congreso, en el local y el federal, se busca que las decisiones sean producto de acuerdos y, de ser posible, de consensos, pero la gobernabilidad se sustenta en el uso de la mayoría y ello no es un ejercicio retórico, sino una realidad y lo puede usted ver en los cabildos, cuyo partido gobernante decide cuáles propuestas se aprueban y cuáles son desechadas. No le demos vueltas, ni nos engañemos.

Ahora bien, esta legislatura presenta características resaltables y van algunas para el comentario: Por primera ocasión en la historia de la legislatura local, hay cinco dirigentes sindicales como diputados, tres de ellos de mayoría y dos plurinominales. De los cinco, cuatro son dirigentes magisteriales, de ellos, tres son de la Sección 39 y están emparentados entre sí, porque dos de ellos son hermanos, Guillermo y Federico Rangel Lozano, y el otro, Nicolás Contreras, es su cuñado. Asimismo, los tres mencionados, Federico, Nicolás y Guillermo, en ese orden, son los últimos tres dirigentes del comité ejecutivo de la Sección 39 del SNTE, que agrupa a los trabajadores de la educación estatales.

El dirigente sindical no magisterial es el diputado Víctor Vázquez, quien es secretario general del sindicato de burócratas estatales.

Asimismo, no sé si hay otra legislatura local donde el Partido Nueva Alianza tenga tantos diputados de mayoría. No lo sé.

Por otra parte, sólo Rigoberto Salazar y Germán Virgen han sido diputados locales. Rigoberto Salazar en 1994, ni no me equivoco, y Germán Virgen en 1997, en la legislatura del empate.

Ahora, al interior del congreso viene el jaloneo entre las fracciones parlamentarias por la integración de las comisiones, particularmente por la presidencia de las mismas. Actualmente, 15 son las comisiones y hay propuestas en el sentido de que se incremente su número hasta 25, sin que ello signifique incrementar el presupuesto destinado para este fin.

Es una propuesta que podría ayudar a que el trabajo legislativo fuera mejor atendido, al tener los diputados que atender menos asuntos y, al mismo tiempo, el presupuesto destinado a las 15 comisiones actualmente existentes se repartiría a partes iguales entre las 25.

De esta manera, cada diputado podría presidir una comisión y ser integrante en otras dos, de acuerdo con el reglamento respectivo. Como ejemplo le pongo a usted, amable lector, la comisión denominada Salud, Asistencia Social, y Protección a la Niñez, Juventud, Adultos Mayores y Discapacidad, que de manera natural podría dividirse en dos: Salud, Asistencia Social, y Protección a la Niñez, sería la primera, y la segunda se denominaría: Juventud, Adultos Mayores y Discapacidad.

Como este caso, hay varias comisiones. Incrementar su número sin que se incremente su costo de operación, daría más efectividad y actividad a las comisiones y a los diputados mismos.

TRES COMENTARIOS AL MARGEN

1. La polémica respecto de si el Poder Judicial debe ser quien haga las propuestas al congreso para elegir a quienes serán los nuevos magistrados, parece irrelevante para algunos, aunque tiene aristas interesantes. Desde mi punto de vista –como profesional del Derecho que no soy- me parece acertado que dos poderes concurran para la creación de un tercero, el Judicial,. En cambio, que el propio poder judicial se renueve a sí mismo, me parece peligroso, muy peligroso.

2. Ayer fue el último informe de gobierno de Silverio Cavazos Cevallos.

3. Yo pienso (y empiezo a pensar que pienso demasiado) que también puede ser una carga, una pesada carga, que día a día algunos de nosotros llevamos encima sin poder quitárnosla, pero deseando hacerlo. No estoy loco, nadie debe juzgar que mi lucidez significa locura, ¿o quizás sí?, y por eso los cuerdos están en el manicomio. Emile Cioran

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