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jueves, junio 03, 2010

Seguridad, Nueva Realidad

Editorial

Nuestras Noticias

Más allá de filias y fobias, más allá del amarillismo, hay la percepción en buena parte de la población de que la seguridad se ha deteriorado. En Manzanillo, Tecomán, Colima y Villa de Alvarez es más perceptible esta sensación de pérdida de la tranquilidad y la paz social que caracterizaban a Colima como entidad.

Además del incremento en los delitos del orden común, sobre todo en lo relativo al robo a casa habitación, el problema se ha incrementado en las últimas semanas, sobre todo porque las balaceras en las calles, las persecuciones a balazo limpio entre grupos de delincuentes, han cobrado notoriedad y se han convertido en asunto de todos los días.

Además de la detección de enormes cantidades de precursores químicos para la fabricación de diferentes drogas, la localización y destrucción de narcolaboratorios también ha sido asunto que conmueva a la sociedad.

Los “levantones”, forma nueva de denominar a los secuestros, también se han incrementado, aunque cabe destacar que la autoridad ha logrado resolver algunos, como el ocurrido ayer en Manzanillo, cuando la policía preventiva recibió el aviso de que en la avenida México, es decir, en pleno centro del puerto, había sido secuestrada una persona.

Con una movilización rápida e inteligente, lograron detener a los secuestradores en la colonia Aldama, logrando rescatar a la persona que había sido “levantada” y, además, detener a las cuatro personas que participaron en este acto delictivo.

Lo ocurrido en Manzanillo es un ejemplo de lo que debe hacerse: primero, que hay personas que se atrevan a denunciar los actos delictivos que presencien y, segundo, que la autoridad actúe de inmediato y logre la captura de los delincuentes.

Pero ello requiere que las fuerzas de seguridad actúen con estricto apego a la ley para que la población pueda tener la confianza de hacer la denuncia.

Este paso es necesario, porque las fuerzas de seguridad no pueden ganar la guerra contra la delincuencia organizada si no son capaces de poner de su lado a la sociedad en su conjunto.

Sociedad y gobierno, en conjunción, son necesarios para ganar esta guerra. El gobierno está obligado a dar el primer paso: ganar la confianza de la sociedad.

Y usted, amable radioescucha, ¿qué opinión tiene al respecto?

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