El asunto de los consejeros electorales está en proceso. Ayer se cerró el plazo para que os aspirantes a este cargo presentaran sus documentos debidamente requisitados y parece que hubo poco más de 80 solicitantes, entre ellos cinco de los siete que originalmente fueron propuestos y aprobado su nombramiento como consejeros propietarios.
Los cinco en cuestión son: Guillermo de Jesús Navarrete Zamora, Ana Carmen González Pimentel, Salvador Ochoa Romero, Edgar Horario Badillo Medina y Juan Manuel Rodríguez Peña.
Más allá de las peripecias, filias y fobias de los partidos. Más allá de todo ello conviene repasar el asunto de la señora María Elena Adriana Ruiz Visfocreli, quien también entregó su solicitud y pretende, nuevamente, ser nombrada como miembro propietaria del Consejo General del Instituto Electoral del Estado de Colima.
Además, esta señora incumple, en esencia, lo exigido en el Artículo 154, fracción VII, del Código Electoral local, que a la letra dice: “No haber tenido cargo alguno de elección popular ni haber sido postulado como candidato en los 5 años anteriores a la fecha de su nombramiento.” Fin de la cita.
Más allá, dije antes, de las filias y fobias que puedan tenerse respecto del comportamiento de esta señora, vale la pena recordar que sus hechos como magistrada presidente del Tribunal Electoral del Estado de Colima demostraron sin duda alguna que no tiene respeto alguno por la ley.
Son hechos que aún están en la memoria viva de los colimenses. Que no deben quedar impunes y que al margen de los arreglos políticos que puede haber entre los partidos está la congruencia y el respeto a sí mismos.
Fue una acción no sólo turbia e ilegal, sino que supuso que todos los demás aceptarían su chapuza sin respingar, sin oponer a su voluntad de torcer la ley y la voluntad expresa de la de los ciudadanos que participaron en la jornada electoral de diciembre de 2003, que l votaron mayoritariamente por Gustavo Vázquez Montes.
Vil Chapuza fue querer anular el 20 por ciento de las casillas instaladas en el municipio de Tecomán y con ese argumento anular todas las casillas instaladas en ese municipio. Todas. Era una huizachada del tamaño del mundo. Ilegal, absurda, de pena ajena.
La elección de gobernador es estatal, no municipal. No se pueden anular las elecciones para gobernador en un municipio, anulando el 20 por ciento de las casillas allí instaladas, sino anulando el total, demostrando que hubo hechos que así lo ameritaron en todas y cada una de las casillas instaladas.
En los archivos del tribunal se encuentra aún esa propuesta de dictamen, que fue rechazada por los otros dos magistrados, como debió ser.
Este es sólo uno de sus hechos como presidente del Tribunal Electoral del estado de Colima, de la señora María Elena Adriana Ruiz Visfocri.
Ahora, esta señora pretende ser Consejera Electoral. El PAN sabe que ella puede ayudarlos a torcer la ley cuando se ocupe y los demás se descuiden. Por eso la propone, seguramente.
Las negociaciones políticas pueden hacer que cosas que parecían imposibles ocurran.
¿Qué tanto está dispuesto el PAN a dar a cambio de que le acepten su propuesta de que la señora Ruiz Visfocri sea consejera propietaria?
Eso lo sabremos en unos días.
Tres Comentarios al Margen
1. Muy bien la actuación de Roberto Chapula de la Mora en el asunto de los agentes de la policía ministerial de Colima presuntamente torturados.
2. Si hay un derecho que los gobernantes no tienen es el derecho de ser ingenuo. Jesús Silva Herzog Márquez
3. Ahora, el que exagera, puede ser sospechado fácilmente de decir la verdad. El que inventa, de estar informado. Karl Kraus
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