La jornada dominical fue francamente desastrosa para los priístas. Perder Zacatecas no es cualquier cosa. No importa si recuperaron Chihuahua y mantuvieron Durango. Lo trascendente es haber caído en Zacatecas de esa forma, prácticamente barridos por los perredistas. Fueron para atrás los priístas.
Y la derrota estuvo anticipada en los medios de comunicación y llegó a hacerse tan evidente por la carencia de buenos candidatos y por obligar a un militante de primer nivel, como es el caso particular de Monreal, a irse de su partido por habérsele impedido participar en un proceso democrático de selección de candidato a gobernador. Pero aún fue cuando el propio Mariano Palacios Alcocer trató de llenar de lodo a su excompañero y señaló supuestos nexos de familiares de Monreal en asuntos de narcotráfico y otros delitos.
Así, los priístas perdieron porque quisieron, o, mejor dicho, porque no supieron, ni Zedillo ni Palacios Alcocer, valorar adecuadamente las consecuencias funestas de una decisión tan absurda como la de mandar a la goma a Monreal, cuando éste había sido consentido, cuidado, empujado e ilusionado para competir por el PRI en este proceso. Perdieron porque despreciaron al mejor candidato posible.
Perder la gubernatura de Zacatecas y las presidencias municipales de Zacatecas y Fresnillo equivale a haber perdido en nuestra entidad Colima y Manzanillo, respectivamente. Entre estos dos municipios representan casi un 43 por ciento del total de electores, de ahí su importancia electoral.
Por estas razones, lo de Zacatecas es una gran lección para todos los priístas, porque vuelve una exigencia insoslayable abrir los espacios para la participación de los militantes en la elección de sus candidatos a cargos de elección popular. Más aún, se requiere alentar la integración de todos los grupos, todos los actores y todos los personajes en la conducción de su partido. Ya no puede haber arrogancias como las de Miguel Angel Novela Villalobos, cuando dijo que si se salía un militante, otros miles más vendrían a sustituirlo.
Se requiere tenerle respeto a los militantes. Respeto verdadero, no discursivo. Se necesita incluir a todos en las tareas de dirección partidista, en la dirigencia territorial y de las organizaciones adherentes. El PRI no puede, no debería, funcionar como si fuera el Club de Tobi, sólo para los cuates, para darles chamba a quienes no encuentran acomodo en otro lugar. Debe dejar de ser basurero político y convertirse en vivero desde donde se fortaleza el árbol priísta.
Son muchas las enseñanzas de estas elecciones, de este cinco de julio tan poco celebrable. Y entre ellas está la del ganador en las elecciones para gobernador en Chihuahua. El candidato más parecido a un panista –Pantricio, le llaman los priístas chihuahenses– fue elegido para competir con los panistas y ganó. La enseñanza fue clara: ganar no es lo más importante en una competencia. Es lo único que vale la pena.
¿Pragmatismo?
TRES COMENTARIOS AL MARGEN
1.- Jesús Orozco Alfaro ha fortalecido su grupo político. Después de la salida de Rogelio Rueda Sánchez del comité municipal del PRI en Manzanillo, gestionó y obtuvo la delegación de Servicio Migratorios, dependiente de la dirección general respectiva de la Secretaría de Gobernación, para uno de sus adláteres, Carlos Orozco Galeana, quien los últimos años fue el escribidor de los discursos de Carlos de la Madrid Virgen.
Con anterioridad., Orozco Alfaro había obtenido otras posiciones para otros de sus partidarios y ello habla muy bien de él y su capacidad de gestión, porque con acciones como ésta fortalece su grupo, consigue empleo para sus seguidores y se prepara para lograr más cargos de elección popular en el año 2 000.
Sus acciones se encuadran en la disputa por los espacios de poder y en la conslidación de un grupo de presión para entrar con fuerza en la búsqueda de cargos de elección popular para él y los suyos en el año dos mil.
Ya habrá más al respecto.
2.- ¿ Sabe usted cuánto gana a la quincena un profesor que trabaje de las siete de la mañana a las dos de la tarde, de lunes a viernes en una secundaria, es decir, que tenga tiempo completo? ¿ Sabe usted cuáles son sus ingresos totales al año?
Si tiene o no una idea al respecto, le informare al detalle en una próxima colaboración.
3.- "(…)No, querido Carlos: al que se agacha, lo pisan doble. Esa es una ley de nuestra política (...)" La guerra de Galio. Héctor Aguilar Camín.
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