Tras las elecciones de julio de este año, muchos se han alborotado. Las sesiones de análisis corren en todos los partidos, cierto, pero es el PRD, la parte que tiene Jesús Ortega, la que llegó a conclusiones “serias”.
El análisis hecho tras haber aplicado estudios de opinión pública, fue que sólo aliados todos los partidos de izquierda con el PAN, podrían ser verdaderos competidores en el proceso electoral del 2012.
De entrada, esta tesis señala la inercia ganadora que trae el PRI desde hace tres años. Asimismo, demuestra que para muchos que provienen de la vieja izquierda, es preferible aliarse a la derecha más corrupta, envilecida e ineficiente en el ejercicio del gobierno, que buscar opciones distintas.
Es evidente que hay una aceptación general de que el PRI está en proceso de recuperar la presidencia de la república. A pesar de haber perdido Oaxaca, Puebla y Sinaloa, el PRI es el partido más fuerte en todo el país. Es cierto, prácticamente fue borrado en Chiapas, pero a cambio de ello, logró imponerse en forma absoluta en Baja California y Aguascalientes, lugares donde barrió con las alcaldías y las diputaciones de mayoría relativa, pues sólo perdió tres y dos distritos, respectivamente.
También es cierto que disminuyó de manera notable el número de municipios que gobernará en Veracruz, pero, por paradójico que parezca, gobernará un mayor número de habitantes, porque ganó todos los municipios grandes, tanto en territorio, como en población.
Pero también es cierto que el PRI debe resolver con atingencia dos ecuaciones complicadas: la elección de su nueva dirigencia nacional y las elecciones de 2011, donde el Estado de México es la joya de la corona.
En el PRI hay una corriente que ve con simpatía y optimismo que Manlio Fabio Beltrones se haga cargo de manera total del partido. Ya tiene la CNOP, los jóvenes y la liga de economistas. Muchos piensan, pensamos, que con el control del partido en sus manos, habría un mando único y una conducción firme del proceso de selección del candidato a presidente de la república que, sin darle muchas vueltas a la hoja -aún cuando el propio Manlio haya dicho que los becerros se pandean por montarlos “tiernos”- el mejor candidato que tiene el PRI es Enrique Peña.
Pero todas éstas son meras elucubraciones, como las son de quienes andan candidateando, o autocandidateándose, para ocupar un cargo de elección, precisamente, en el 2012.
De ellos hablaremos en próxima colaboración.
TRES COMENTARIOS AL MARGEN
1. El conflicto del ayuntamiento de Tecomán con la CFE y con la empresa que construye el gasoducto, me recuerda las posturas, y las imposturas, de Locho Morán en relación con la Cervecería Modelo. Igualitos. Malitos como alcaldes, pero buenos para el escándalo mediático.
2. La credibilidad es algo difícil de ganar y los medios de comunicación corren el riesgo todos los días. Decir falsedades sin fuente, lleva a la pérdida de la credibilidad del medio que las publica. Pero también la autoridad está obligada a desmentir al medio que publica falsedades.
3. No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo. Oscar Wilde