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jueves, julio 26, 2012

Pensiones: ¿problema sin fin?



El martes hablé en este espacio de las pensiones y las jubilaciones y de la inutilidad de la Dirección de Pensiones del gobierno estatal como instancia donde los trabajadores se jubilen o pensionen.
Veamos el asunto: los trabajadores de los ayuntamientos, gobierno estatal y los demás poderes, así como los de organismos descentralizados, estatales o municipales, entregan quincena a quincena una lana a la Dirección de Pensiones y otra parte similar pone su patrón, es decir, el ayuntamiento, organismo o poder de que se trate.
Ese dinero que recibe la Dirección de Pensiones se utiliza para hacer préstamos a los propios trabajadores aportantes, sindicalizados, de base o de confianza. Hasta ahí, todo parece ir bien. No hay ningún problema.
El asunto es que cuando un trabajador se quiere pensionar, no va a la Dirección de Pensiones a hacer su trámite, sino que lo hace directamente ante su sindicato o la última dependencia donde laboró, en caso de ser de confianza.
Ahora bien, ¿qué pasa con los fondos aportados por los ayuntamientos, gobierno estatal, organismos descentralizados, estatales y municipales, y de los poderes judicial y legislativo?
Eso es algo que debe responder el director de Pensiones. 
Ahora bien: si los fondos que entregan los trabajadores y los patrones no tienen como finalidad otorgar los pensiones a quienes así lo soliciten, ¿qué caso tiene que todos los patrones: ayuntamientos, gobierno estatal, organismos descentralizados estatales y municipales, poder judicial y poder legislativo, entreguen cada quincena la parte proporcional de cada trabajador?
Con esto me refiero a la parte que les corresponde a los patrones entregar y no a las retenciones hechas a los trabajadores, por concepto  de sus aportaciones al fondo de pensiones y por los préstamos obtenidos de Pensiones.
Porque los ayuntamientos entregan a Pensiones el dos y medio por ciento de sueldo y sobresueldo de cada uno de sus trabajadores, mientras que los trabajadores aportan el cinco por ciento de esos mismos conceptos y el gobierno del estado aporta tan sólo el uno por ciento.
Desde la entrada, hay una desproporción enorme, un desequilibrio entre lo aportado por los ayuntamientos, los trabajadores y el gobierno del estado. ¿Es justa esta situación? Evidentemente, no. ¿Es legal? La respuesta es obvia: sí.
Ahora bien, aunque la Dirección de Pensiones no pensiona ni paga las jubilaciones, ¡¡¡se queda con lo que los trabajadores aportan a esa dependencia en los años que hayan trabajado!!!  Más aún, los trabajadores no pueden retirar sus fondos de pensiones cuando se vayan a jubilar, porque la ley no les permite hacerlo, so pena de no ser pensionados. Es decir, si un trabajador solicita que le sea entregado su fondo, entonces ya no puede ser pensionado, ni jubilado. ¡¡¡Todo ello a pesar de que la Dirección de Pensiones no jubila ni pensiona a nadie!!!
Es todo un encaje legal. Todos esos fondos de los trabajadores pensionados o jubilados se quedan para integrarse al patrimonio de Pensiones. Pero eso es legal, pero puede pelearse contra ello e los tribunales, porque son fondos propiedad del trabajador, no de la dependencia.
Pongo el caso de un trabajador del ayuntamiento de Manzanillo: cumple 30 años de servicio y solicita su jubilación. Se autoriza y el ayuntamiento le empieza a pagar, de su propio presupuesto, su jubilación a partir de la fecha determinada. Hasta ahí todo bien. Por eso pregunto: ¿por qué no puede el trabajador recoger sus aportaciones hechas a la Dirección Pensiones del Gobierno del Estado, si ésta dependencia no le paga su jubilación y tampoco entregó esos fondos al ayuntamiento respectivo. Simple y llanamente se queda con las aportaciones que trabajador y ayuntamiento hicieron a lo largo de 30 años. Campechanamente, sin ninguna responsabilidad de ningún tipo. Esto es un duro golpe a la economía de los ayuntamientos y de los trabajadores.
Pero el asunto tiene otra cara: los ayuntamientos, gobierno del estado, congreso, supremo tribunal, organismos descentralizados, suelen no entregar a Pensiones las aportaciones que los trabajadores hacen y que les son descontadas quincena a quincena por sus respectivos patrones y a ello debe aunársele que los descuentos por los préstamos recibidos por los trabajadores, tampoco son enterados a la dependencia estatal.
Esto crea un embrollo económico, serio grave, para todos los involucrados: trabajadores y patrones. Por eso en varias ocasiones, los trabajadores se molestan cuando les dicen que no hay dinero para prestar porque sus patrones no han enterado a Pensiones las aportaciones de los trabajadores, ya no digamos las de los patrones.
En este sentido, pregunto y me pregunto: ¿qué caso tiene seguir para los patrones aportando a pensiones la parte que les corresponde, dado que es un dinero que no van a recuperar jamás?
Desde mi punto de vista, los ayuntamiento deberían de dejar de aportar el dos y medio por ciento a Pensiones, a fin de cuentas, esos recursos no tiene caso entregarlos, mejor dejarlos para ir formando un fondo que coadyuve en el pago de jubilaciones y pensiones a su propios trabajadores.
Es mi punto de vista y voy a esperar a los nuevos diputados para ver qué hacen al respecto, porque los actuales, según el hoy presidente de la Comisión de Gobierno y Acuerdos Parlamentarios, Rigoberto Salazar Velasco, se la pasaron haciendo estudios acerca de cómo resolver el asunto de las pensiones y no hicieron nada, excepto posponer la autorización de muchas pensiones y jubilaciones.
Veremos y comentaremos.
Tres Comentarios al Margen
1. Según me informó un altísimo personaje, el aún senador priista Rogelio Rueda Sánchez, podría ser nombrado la próxima semana como Secretario General de Gobierno, en sustitución de René Rodríguez Alcaraz, quien llegó ahí tras haber ocupado la presidencia del Tribunal Electoral del Estado.
2. ¿Ya sustituyó el alcalde Villa de Alvarez al director de seguridad pública por no haber aprobado los exámenes de control y confianza? Por lo visto, no sólo es un solapador, sino que va en el rumbo de la complicidad abierta y que poco le importa el cumplimiento de sus responsabilidades públicas. Las pruebas son muy claras.
3. Hoy es un día especial. Día de estar con la mujer amada, con la esposa, amiga, compañera.
Twitter: @macosta68

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