La suerte ya está echada. Los panistas han dado mucho de qué hablar en los últimos días. Hicieron un gran revuelo con el asunto de la visita del secretario general del comité ejecutivo nacional de su partido, Rogelio Carvajal y el anuncio de que Colima “está lista” para ser gobernada por Acción Nacional´y dijo que su partido vigilará que no se cometan excesos contra el alcalde de Manzanillo, Virgilio Mendoza Amezcua.
Luego, vino el apoyo multitudinario del comité estatal para el alcalde porteño. Ya se sabe, la cargada estuvo lista.
Después, vino la declaración de Leoncio Morán y el arranque de su precampaña (a ver cómo le hacen las autoridades electorales para pararlo) con una comida el sábado con sus partidarios.
Bueno, eso forma parte de la normalidad democrática. Está bien que Leoncio Morán y Virgilio Mendoza digan que están puestos, listos y dispuestos, al fin de cuentas, ellos mismos saben que ninguno de ellos será el candidato panista a la gubernatura.
Casi al mismo tiempo, el dirigente nacional del PAN, Germán Martínez, dijo que en 2009 habrá una gobernadora del PAN y eso tiene fuertes referencias para Colima, porque en ningún otro de los estados donde habrá elección de gobernador, tiene el PAN probabilidades de poner a una candidata, excepto Colima.
El compromiso asumido por el dirigente con las mujeres de su partido, tuvo antecedentes en las visita del secretario genera a Colima, porque entre las muchas cosas que dijo respecto del asunto de Nabor Ochoa López fue que él forma parte de la diputación federal, ¡desde luego!, y que debía el porteño trabajar por la unidad del partido. No se refirió a si su proceso para sancionarlo había concluido, o iniciado, pero fue enfático en cuanto a que nabor debía trabajar por la unidad de su partido.
Desde mi punto de vista, los panistas, encabezados por su dirigente estatal, Fernando Antero, aprovecharon el viaje para darle impulso a Virgilio Mendoza con el asunto de la supuesta persecución política de que es víctima.
Aquí, lo interesante es ver cómo van a manejar este embrollo los panistas: Leoncio Morán ya se “destapó”, es decir, ya no es tapado. Virgilio Mendoza hizo otra furris aparición en los medios para, cara contrito y suplicante, rogarle a los panistas del primer distrito electoral para que “permitan” que el candidato a gobernador sea alguien de Manzanillo.
Lo cierto es que la suerte ya está echada y que es muy probable que el “grito” de Virgilio Mendoza sea escuchado Locho, Enrique Michel, Pedro Peralta, Fernando Ramírez, Nabor Ochoa y los poderes fácticos que, hasta hoy, han decidido quién juega para gobernador.
El asunto está sumamente complicado para todos, porque si el candidato de los panistas sale de Manzanillo, la única posibilidad de que no exista rompimiento es que Nabor Ochoa sea el candidato. En las otras dos opciones, Nabor podría irse del PAN. Ese es un escenario previsible, las probabilidades de que ello ocurra se incrementan día a día, porque las diferencias entre las infanterías crecen exponencialmente.
El boquete que Nabor les puede hacer en Manzanillo a los panistas es muy grande. No lo dude usted. El diputado federal mantiene una actividad constante y permanente con la gente de aquel municipio y lo menciono de manera especial porque los panistas le pueden ofrecer a Nabor Ochoa la candidatura a alcalde, la de diputado local, de mayoría o plurinominal, para que fuere el líder del congreso, y no más.
Es cierto que, muy probablemente, los panistas contarán con el apoyo y los recursos del PANAL, porque a partir del 2006, en todas las elecciones para gobernador han ido juntos y no veo razones de peso que permitan suponer que la alianza con el PAN se romperá por Colima.
Sin embargo, ni siquiera eso podría serles suficiente a los panistas para ganar si Nabor Ochoa y sus partidarios deciden abandonar el PAN. No le demos vueltas: lo que Nabor Ochoa puede restarle al PAN en Manzanillo y Tecomán es mayor que lo que el PANAL le podría aportarle al mismo PAN.
Nabor Ochoa está convertido en un factor real de poder. Punto. Le guste o no a los panistas, de aquí del comité nacional, el resultado de la elección para gobernador en el 2009 pasa por lo que le ocurra a Nabor Ochoa López.
Por eso, la decisión de si va a ir Martha Sosa a la candidatura, para cumplir la promesa hecha por el dirigente nacional del PAN de que una mujer sería candidata a ese cargo en 2009, puede convertirse en una situación toral para el panismo colimense.
Martha Sosa tiene una reconocida virtud: une a sus rivales políticos externos y divide a los panistas. Esto es algo que todo mundo, en el PAN y fuera de él, reconoce como verdadero.
Martha Sosa cree, piensa, afirma, que la bronca de Nabor con Virgilio no le incumbe, que ella está al margen de esa maniobra. Se engaña la señora Martha Sosa, porque los panistas arropados por Antonio Morales están constituyéndose como un poder en Colima. Tienen el partido y quieren retenerlo. Saben que la edad es el mayor enemigo de sus rivales internos: Martha Sosa es la aspirante de más edad, nació en la primera mitad del siglo pasado, y el grupo de Antonio Morales sabe que si Martha Sosa es candidata y pierde, ya se acabó y se quedan, prácticamente, solos en el escenario para el 2012, cuando tranquilamente, para cerrar la pinza, los candidatos al senado podrían ser Antonio Morales y Virgilio Mendoza, uno de cada distrito electoral, ambos del mismo grupo político.
Saben que Nabor Ochoa se irá del PAN si no es candidato a gobernador, por lo que ya lo consideran fuera de su partido.
Como dije al principio: la suerte ya está echada.
TRES COMENTARIOS AL MARGEN
1. Quien sabe adular, sabe calumniar. Napoleón Bonaparte
2. Las personas civilizadas están tan cerca de la barbarie como el hierro más pulido lo está de la herrumbre. Antonio de Rivarol
3. La política es la única ciencia para la que no se exige preparación específica alguna. Stevenson
http:www.agendapolitica.blogspot.com
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