Las elecciones llegaron,
prácticamente, a su fin. El miércoles de la próxima semana es el último día
permitido para hacer actos públicos de proselitismo político a partidos y
candidatos.
Este proceso electoral es el primero
en que las redes sociales han tenido una influencia mayúscula. En Colima, los
partidos, los candidatos y sus equipos de campaña han dedicado muchas horas a
manejar publicidad en medios convencionales, pro, sobre todo, en las redes
sociales.
Facebook, Twitter y Youtube
son las principales, aunque también el correo electrónico ha servido para
propagar las bondades de sus candidatos y las deficiencias o basura de los
otros aspirantes.
Como desde hace muchos años,
el Partido Acción Nacional se ha distinguido por hacer de la propaganda negra y
de la guerra sucia sus armas principales. En Colima, el PAN se va volcado en el
uso de esta clase de política comunicacional para tratar de “bajar” a sus
oponentes. Los dos candidatos que más han sufrido este tipo de agresiones han
sido Nacho Peralta, candidato a gobernador y Pico Zepeda, candidato a
presidente municipal de Manzanillo. Ambos propuestos por la Coalición formada
por los partidos Verde Ecologista de México, Nueva Alianza y Revolucionario
Institucional.
De los dos candidatos, el más
golpeado, el más atacado, ha sido, sin duda alguna, el porteño Pico Zepeda. Un
día sí y otro también, circulan memes, columnas periodísticas, comentarios que
buscan denigrarlo, destruirlo. Hay un evidente deseo de destruirlo, de hacerlo
pedazos, de desaparecerlo del mapa político de Manzanillo.
Ni siquiera sumando todos los
ataques sufridos por todos los candidatos de todos los partidos a todos los
cargos de elección en el Estado de Colima, se pueden equiparar, por su número y
rudeza, en los sufridos por Pico Zepeda y sus partidarios.
Eso es un hecho indubitable,
inobjetable. El odio, el rencor y las vísceras se han impuesto sobre la
civilidad política y la capacidad de análisis del acontecer porteño.
Basta leer lo que circula en
internet para corroborar mi dicho.
Sin embargo, a pesar de eso,
Pico Zepeda no se arredrado y ha ido cuesta arriba en esta elección en la que
empezó 19 puntos debajo de la candidata del PAN, Gabriela Benavides Cobos.
Tras casi 60 días de campaña
en Manzanillo, el panorama ha cambiado. Pico Zepeda ha hecho lo mismo que hizo
hace tres años: trabajar desde muy temprano hasta muy tarde. Hacer alianzas
políticas y formar equipos de trabajo comprometidos con el proyecto que tienen.
Virgilio Mendoza Amezcua está
convertido en el principal impulsor de la candidata panista, Gabriela
Benavides, y hace cuanto puede, que es mucho, para ayudarla a ganar la
elección. Virgilio y panistas que lo siguen, promueven la votación discriminada,
diferenciada. Impulsan a Nacho Peralta para gobernador y a Gabriela Benavides
para presidente municipal. Igual lo hacen algunos priistas ligados a un
exalcalde porteño.
Gabriela Benavides tiene la
ventaja de que todos los panistas manzanillenses promueven el voto en su favor,
aun los partidarios de Jorge Luis Preciado Rodríguez, que saben que Virgilio Mendoza, miembros del equipo de
la propia Gabriela Benavides y funcionarios del ayuntamiento porteño impulsan
abiertamente el voto en favor de Nacho Peralta.
Pero al momento de escribir
esta columna, con los datos a la vista, no hay nada para nadie. Más allá de
propuestas, de dinero invertido en la campaña, que ha sido muchísimo el que hoy
invirtió el PAN en este proceso municipal, Manzanillo será, desde mi punto de
vista, de quien conjunte un mejor equipo de movilización electoral y lo haga
funcionar óptimamente.
Por lo pronto, el domingo 7 de
junio, por ahí de la 11 y media de la noche, sabremos quién ganó.
El lunes 8 de junio, lo
comentaremos en el programa Palabras Mayores.
TRES COMENTARIOS AL MARGEN
1. Inician los cierres de
campaña de los candidatos a gobernador del estado. Campañas infumables de
algunos, intrascendentes. ¿Cuántos de esos ocho candidatos lograrán obtener más
del tres or ciento de los votos emitidos?
2. Una golondrina no hace
verano, cierto, pero sí permite vislumbrar el futuro. Espero poder continuar
escribiendo ya regularmente.
3. ¿Por qué temen tanto a la
palabra abierta? Bertolt Brecht
agendapolitica.blogspot.com
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