Buscar este blog

martes, diciembre 12, 2000

XERL, 12 diciembre 2000

Los hechos desmienten a las personas y más en el caso de los políticos. Enrique Michel Ruiz, alcalde panista de Colima, hizo durante su campaña muchas promesas, entre las que sobresalen las de consultar a la sociedad para los asuntos de trascendencia.

En los hechos, ha incumplido su palabra respecto de dos temas: el incremento a las contribuciones y el asunto de las autoridades auxiliares.

Durante un foro habido en la Universidad de Colima hace pocos días, El alcalde Michel Ruiz dijo: “(...) En nuestro país, las leyes se han hecho para consolidar un proyecto de nación que busca la democracia representativa y que impide la participación de la ciudadanía. Esto es muy malo para la vida del país, pues vuelve a los funcionarios electos propietarios de la soberanía durante su período de gobierno. A nadie le tienen que consultar a nadie le rinden cuentas...... Todos los ciudadanos deben poder participar sin discriminaciones de carácter político, religioso, racial, de género, ideológico, sexual o de cualquier otra especie. La participación debe ser continua e informada. Las leyes deben propiciar este cambio de perspectiva..... Esto nos obliga, como autoridad, a conocer y reconocer la diversidad de opiniones que pueden existir en torno a cada tema que implique decisiones de gobierno. El respeto no está en oír y olvidar, sino en escuchar, considerar y responder. No podemos simular el respeto y agotarlo en un plan de relaciones públicas de los poderes. Para cada propuesta se exige una respuesta. (...)”. Fin de la cita.

Los anteriores conceptos fueron expresados por Enrique Michel Ruiz, presidente municipal de Colima y ahora los traigo a colación, con ánimo de pedir congruencia entre el discurso y los hechos.

Este discurso choca totalmente con los hechos del alcalde, quien se niega a hacer una verdadera consulta a las comunidades rurales para que sean los pobladores de éstas quienes elijan a las autoridades auxiliares. Nada pierde el ayuntamiento con validar la selección hecha por los ciudadanos. Por el contrario, gana en sensibilidad, acercamiento con la gente y, sobre todo, en hacer realidad su propio discurso.

Tampoco consultó a los ciudadanos para el asunto de los impuestos y ya hay quejas al respecto.

¿Qué va a hacer el alcalde Michel Ruiz?

No lo sé, pero estoy seguro de que sus actos le harán perder credibilidad ante la sociedad.

No hay comentarios.: