NI el propio Encinas creía su triunfo. ni el mismo, ni su equipo cercano, tenían la certeza de que vencerían a "los chuchos", en el Distrito Federal y en el país. Más allá de las triquiñuelas, de los acarreos, del robo de urnas -típico de la década de los treinta y cuarenta, cuando se robaban urnas y se ultimaba a balazos a los contrincantes- está el asunto de la credibilidad en el PRD.
Pero tampoco este conjunto enorme de trampas de la peor especie es una novedad en el PRD. No han tenido una elección limpia o transparente, desde que el partido nació.
En Colima, los "chuchistas" les tomaron la medida a los Sotelo-Vizcaíno, algo que empezó a ser previsible cuando fueron los miembros de este grupo quienes se quejaron por la supuesta inscripción de priístas en el padrón del PRD y hasta hubo el alboroto de un regidor -de Armería, si mal no recuerdo- que dijo que él no era miembro del PRD, ni se había afiliado a ese partido, pues seguía formando partes de las filas tricolores.
Lo cierto es que la afiliación masiva que realizaron los partidarios de Jesús Orozco les funcionó a las maravillas, pues fue el puntal de su triunfo electoral.
La participación de Enrique Salazar Abaroa sirvió para desviar el número justo de votos para que ganara de manera apretada el candidato de Jesús Orozco a la dirigencia estatal.
Pero tampoco este conjunto enorme de trampas de la peor especie es una novedad en el PRD. No han tenido una elección limpia o transparente, desde que el partido nació.
En Colima, los "chuchistas" les tomaron la medida a los Sotelo-Vizcaíno, algo que empezó a ser previsible cuando fueron los miembros de este grupo quienes se quejaron por la supuesta inscripción de priístas en el padrón del PRD y hasta hubo el alboroto de un regidor -de Armería, si mal no recuerdo- que dijo que él no era miembro del PRD, ni se había afiliado a ese partido, pues seguía formando partes de las filas tricolores.
Lo cierto es que la afiliación masiva que realizaron los partidarios de Jesús Orozco les funcionó a las maravillas, pues fue el puntal de su triunfo electoral.
La participación de Enrique Salazar Abaroa sirvió para desviar el número justo de votos para que ganara de manera apretada el candidato de Jesús Orozco a la dirigencia estatal.
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